El bazar de los malos sueños
Stephen King
Plaza y janes
Febrero 2017
Fantasia, Ciencia ficcion
608 paginas, 23.90€
Independiente
«Escribí estos relatos especialmente para ti. Adelante, léelos, pero ten mucho cuidado. Los mejores tienen dientes.»
Stephen King
Stephen King
Stephen King nos presenta en El bazar de los malos sueños
una excepcional selección de relatos, algunos nuevos y otros revisados
en profundidad. Cada uno viene precedido de su propia introducción,
donde habla sobre sus orígenes y sobre los motivos que lo llevaron a
escribirlo, incluyendo aspectos autobiográficos.
Aunque han
pasado ya treinta y cinco años desde que escribió su primera colección,
Stephen King sigue deslumbrándonos con su maestría en el género. En
esta ocasión trata temas como la moralidad, la vida después de la
muerte, la culpa y lo que corregiríamos del pasado si pudiéramos ver el
futuro.
Os
voy a confesar algo, mira si he leído en todos estos años, pero
este es el primer libro que leo de este conocido escritor. La verdad
es que siempre me ha llamado la atención e incluso tengo algún
libro suyo en casa, pero sin leerlos. He visto películas suyas, las
cuales me han gustado bastante y es por esto que me decidí a leer
este libro de cuentos, pues supuse que no contendría el terror que
siempre he esperado en sus libros e historias. Es por esto, que en
parte, me he llevado una gran decepción leyendo esta serie de
cuentos, pues no he encontrado nada de lo que tanto me temía y me
retenía a la hora de leerlo.
Un
libro donde King nos muestra como piensa su mente, como actúa la
hora de crear su hora, al menos estas, sus pequeñas obras, pues una
de las cosas que me han gustado más y de las que he disfrutado
mucho, son las pequeñas explicaciones y reflexiones que hace el
propio King sobre cada cuento. Esta a sido una forma de conocer un
poco más a este gran escritor, que para mi, es una gran desconocido
y la verdad, que gusta mucho como piensa.
De
esta forma he ido viendo de donde sacaba la inspiración para crear
estas veinte historias. Algunas de la nada, sin mas dilación que
asistir a una escena simple y cotidiana, otras de fraguan más
lentamente.
Vente
historias donde nos habla de bastantes cosas, pero en el que la
muerte tiene una influencia muy poderosa. Luego tenemos el misterio a
lo desconocido, la maldad del ser humano, lo inexplicable de la
humanidad y las cosas esas que no queremos ni imaginar.
Como
os he dicho antes, esperaba encontrarme con escenas de miedo, pasar
terror, que las historias no pudiera quitármelas de la cabeza, como
me paso con la película El resplandor o La milla verde.
Quizás es por el hecho de que
no tienen la longitud apropiada, o simplemente, por que en mi opinión
no daban tanto la talla. Pese a todo, he disfrutado leyéndolas,
claro, unas más que otras.
Leyendo
como coches devoran humanos, como una simple decisión como es
levantar el dedo corazón, puede suponer mucho, o la maldad del ser
humano o no humano.
Los
relatos que mas he disfrutado, han sido los que van más allá de lo
cotidiano. El niño malo y Ur, esta ultima con referencias de su obra
La torre oscura.
Un
libro para aquellos que les guste este autor, pues es una forma de
conocerlo un poco mas. También para aquellos que les guste leer
relatos y para los que, como yo, quieren empezar con un autor y les
da un poco de miedo.
Ahora
se, que tengo que leer los libros de La torre oscura, y que están
esperándome en la estantería, pues se que aunque un poco
complicado, es un mundo que me va a gustar mucho.
Sara.
A este le tengo muchísimas ganas.
ResponderEliminarUn beso ^^
¡Hola!
ResponderEliminarquiero leer al autor, pero no creo que me anime por primera vez con relatos cortos, prefiero una novela.
¡besos!
No es mi estilo, lo dejo pesar, pero agradezco la reseña :P
ResponderEliminarBesitos ^^
Estoy de acuerdo con lo que dices. Si no han comenzado a leerlo y lo quieren probar con esta obra lo logran, pero yo te diré que ya no tengo estomago para leerlo, uff lo paso fatal últimamente.
ResponderEliminarUn saludo
No creo que me anime con él de momento...
ResponderEliminarBesotes